Sólo unos pocos kilómetros fuera de Arica, la playa se convierte en una abrupta costa rocosa que está habitada por millares de cormoranes, pelícanos, gaviotas y pingüinos de Humboldt. El sendero conduce a misteriosas cuevas pasadas y extrañas puertas rocosas siempre acompañadas por el rugido de las olas del Pacífico. Casi ningún otro lugar en el norte de Chile puede jactarse de tantas aves, especialmente en horas de la tarde, cuando los enormes enjambres de cormoranes y pelícanos regresan a sus lugares nocturnos de reproducción en Corazones. El sendero sigue la ruta del guano utilizada por los lugareños que todavía cosechan guano.
Cómo llegar a Corazones:
La Playa Corazones se encuentra al sur de Arica en el final de la carretera costera. Los taxis ofrecen una servicio desde centro de la ciudad a Corazones de 3.000 pesos por trayecto.
Descripción
La Playa de Corazones
Desde el espacio de estacionamiento de Corazones, el camino pasa a entradas de cuevas y empinadas colinas de la costa que se levantan hasta 150 m. De vez en cuando, oímos los gritos de los lobos marinos que se extienden en las islas mar adentro. En ocasiones, el sendero serpentea fuertemente a la baja a pequeñas calas donde conchas y bienes de transición de la competencia se puede encontrar. Caminamos alrededor de 2,7 km siguiendo el camino bien marcado hasta llegar a un lugar llamado animita (pequeña alma), donde se encuentran tres cruces y una pequeña capilla. Dado que la ruta incluye secciones muy inseguras y resbaladizas a partir de este punto, nos damos la vuelta y caminamos de regreso de la misma manera, pero esta vez con una nueva perspectiva del norte.
